¿Cómo frenar la caída del cabello?

En nuestro día a día estamos expuestos a diversos factores que pueden hacer que se nos caiga en mayor o menor medida nuestro cabello. Para muchas personas esto representa una inquietud, ya que puede suponer un indicador de un problema de salud o simplemente porque afecta a su estética personal. 

Afortunadamente, hay algunas medidas que podemos poner en práctica para evitar la caída de nuestro cabello y con ello mejorar su salud. 

Causas principales de la caída del cabello

Lo normal es perder de media entre 50 y 100 pelos al día. Existe un ciclo capilar que determina esta caída, y forma parte de nuestra herencia como mamíferos. Gracias a ello adaptamos nuestro pelo a los cambios de tiempo que surgen durante el año.

La pérdida de cabello se asocia con cinco causas principales, tanto internas como externas. Es importante reconocer cuál es su origen para poder tratar el problema de raíz:

• La herencia familiar (o alopecia androgénica) es la causa más común de la pérdida de cabello. Hay varios genes que están implicados en ella y muchos de ellos están relacionados con el cromosoma X, que corresponde a la herencia familiar materna.

• El estrés supone la segunda causa más frecuente en cuanto a la caída del cabello. Cuando nos sometemos a un periodo de estrés pronunciado, las células del cuero cabelludo entran en el llamado ‘efluvio telógeno’, una alteración del ciclo capilar que acelera la caída del cabello pasados 3 o 4 meses.

• Los cambios hormonales, también suponen una causa principal, sobre todo en mujeres que se encuentran en la menopausia, embarazadas o a las que toman la píldora anticonceptiva. Aún así también puede ocurrir que se den cambios hormonales debido al fotoperiodo (horas de luz y oscuridad durante el día) y al cambio de estaciones (en primavera y en otoño se nos cae más el cabello que en invierno y verano).

• Una alimentación inadecuada es una causa común de caída del cabello. El déficit de vitaminas y minerales en nuestra dieta debilita el pelo y favorece su caída, ya que son componentes esenciales en la estructura de nuestro cabello. Llevar una buena alimentación nos garantiza un pelo nutrido y fuerte, y con ello un aspecto más saludable.

• Finalmente, el consumo de tabaco hace que nuestro cabello se vuelva frágil, quebradizo y sin brillo. Los componentes nocivos del tabaco afectan a nuestra salud y esto incluye nuestro pelo. A nivel interno su toxicidad puede reducir la cantidad de nutrientes que llegan al cuero cabelludo, haciendo así que se nos caiga el pelo más a menudo. Por otro lado, debido a la porosidad del pelo, este absorbe del exterior sustancias dañinas que se acumulan en él haciendo que se caiga en exceso y dándole además un aspecto menos saludable.

¿Cuáles son las fases del ciclo capilar?

Cada pelo nace de un folículo piloso, el cual tiene un bulbo pilosoen su base. Las células de la papila dérmica se encuentran en el bulbo y son las encargadas de regular las fases del ciclo capilar. Este se divide en 3 etapas: la de crecimiento o fase anágena, la de transición o fase catágena y la de caída o fase telógena.

Fase anágena (crecimiento)

En esta fase, la más larga del ciclo, el cabello crece fuerte y sano durante un período que suele durar entre 2 y 6 años. Es un momento de vital importancia porque factores externos como el estrés, fumar o una alimentación deficiente pueden detener o mermar el crecimiento del pelo. Aunque depende de cada persona, el cabello suele crecer entorno a 1 centímetro al mes, por eso cuanto más dure esta fase más crecerá nuestro pelo. En esta etapa se determina la longitud de nuestro cabello.

Fase catágena (transición)

Es la más corta, dura de 3 a 6 semanas. En esta etapa, el crecimiento del cabello se modera hasta verse estancado, es decir, el cabello frena su crecimiento y el folículo piloso se encoge.

Fase telógena (caída)

En este momento del ciclo, que dura alrededor de 3 meses, el pelo se cae porque uno nuevo empieza a crecer desde la raíz. Esta pérdida de cabello se intensifica por diversos motivos (estrés, consumo de tabaco, una mala alimentación o por cambios hormonales, tal y como hemos comentado).

¿Cuándo hay que preocuparse por la caída del cabello?

El folículo piloso es un tejido vivo que pasa de manera natural por una fase de caída dentro de su ciclo de vida. Lo habitual es que no supere los 3 meses de duración pero debemos tener en cuenta que hay épocas del año, como en el otoño, en las que nuestro pelo puede caerse más sin ser motivo de alarma.Te recomendamos acudir a un dermatólogo en el caso de detectar una caída capilar excesiva y siempre que vaya acompañada de alguno de los siguientes síntomas:

• Calvicie en zonas concretas y circulares del cuero cabelludo (alopecia areata).
• Picor y descamación excesiva en zonas donde hay menos densidad capilar (tinea capitis).
• Rojez e inflamación en zonas del cuero cabelludo (dermatitis seborreica).
• Pérdida de pelo también en otras zonas del cuerpo como cejas o pestañas (madarosis).
• Pérdida gradual en la parte superior de la cabeza (alopecia difusa).
• Reducción del grosor y debilitamiento súbito del cabello.

Consejos para prevenir y reducir la pérdida de pelo

Además de consultar con un especialista, puedes seguir algunos consejos con los que combatir la caída del cabello para tratar de prevenirla y/o disminuirla:

Mantén una alimentación equilibrada

Es importante seguir una dieta rica en vitaminas y minerales, ya que son esenciales para una buena salud capilar. El zinc es necesario para la producción dequeratina, proteína que forma parte de la estructura del cabello y fortalece los folículos pilosos (está presente en legumbres y frutos secos). Las vitaminas del grupo B, especialmente la biotina (vitamina B7), son esenciales para el crecimiento del cuero cabelludo (se encuentran en la carne, el pescado, los lácteos y las legumbres). Asimismo, las vitaminas del grupo D permiten la absorción de calcio y otros minerales necesarios para el crecimiento del pelo (las encontramos en los lácteos, huevos y pescado azul). 

Cuida tu cuero cabelludo

Usa productos libres de químicos, como los sulfatos, para no maltratar tu pelo. Evita el calor excesivo de las planchas o secadores y preferentemente aplica protectores térmicos. Además, no te peines con cepillos con cerdas duras ni realices demasiada fuerza en el cepillado, ya que puedes dañar o romper el cabello. 

Lava tu pelo masajeando en círculos

Usa las yemas de los dedos para estimular la circulación sanguínea del cuero cabelludo. Esto además ayuda a que los nutrientes que lleguen a la raíz se distribuyan por los folículos pilosos, y que los tratamientos capilares que podamos usar se absorban de forma más rápida y efectiva, mejorando así el aspecto del cabello.

Usa complementos alimenticios

Los ingredientes naturales de los suplementos aportan propiedades beneficiosas al organismo que permiten reducir la inflamación y mejorar la circulación en el cuero cabelludo. Con su ingesta puedes ayudar a reducir la caída del cabello al proporcionar los nutrientes y vitaminas esenciales para mantener una melena fuerte y saludable. 

Complementos alimenticios para evitar la caída del cabello

Gracias a los extractos de origen vegetal y los nutrientes presentes en los suplementos, podemos conseguir reducir la caída del pelo y promover el crecimiento y nutrición del cabello para mantenerlo sano y fuerte.

En la siguiente tabla te recomendamos algunos de los complementos alimenticios más útiles a la hora de mantener un cabello sano y fuerte:

Además de estos complementos te recomendamos la línea Keraphyte, que consta de dos productos: Hair Growth and Loss Prevention Lotion, que tiene una fórmula revolucionaria llamada Anagendil y Keraphyte Hair Growth Treatment, que se ha demostrado que reduce la caída del cabello en la etapa telógena del ciclo capilar.

Como hemos visto, la pérdida de cabello puede ser una preocupación común tanto en hombres como en mujeres, pero existen diversas formas de prevenirla y frenarla. Además de mejorar la salud capilar, los suplementos pueden suponer una ayuda extra a la hora de complementar nuestros hábitos anticaída, nutriendo y fortaleciendo nuestro cabello.